Águilas negras_ José Quispe_Cap1_ Cruz de hierro.

 Capítulo 1: Cruz de hierro.

“Orcum intrans, vocavi Hitler. Deus mihi ignoscat, sed et corpus eius volo, integritatem eius volo. Per commutationem …(“...rayos me falta la cruz de hierro “¿Dónde está, dónde diantres está?. -

-Rebusca debajo de un tablero de ajedrez en su suelo rojo—le dijo una voz en su cabeza–,

–No hay nada debajo.--dijo él– 

Por fin buscando detrás del mueble con funda amarilla encontró la cruz que compro en Amazon. “¿alguien ha movido la cruz?

-No creo–Dijo la misma primera av.

-Pero se ha movido– dijo una segunda voz en su cabeza.

Edgar volvió a repetir las últimas palabras del ritual y con  la cruz de hierro hizo brotar de su trigueña piel dos gotas de sangre. En un momento no pasó nada,..., pero luego la tierra empezó a temblar “Temblor, temblor, escuchaba que su madre decía, mientras salía afuera, y lo dejaba a él”. El no perdió la calma ““Orcum intrans, vocavi Hitler.Deus mihi …¡Per commutation em duas… Entonces se hizo un círculo engro en el suelo de su sala… Y una mano emergió del piso.

 El corazón de Edgar se contuvo. Empezó a salir, el  otro brazo del hombre que se encontraba atorado en un pozo.–Lleva las mangas beis de su chaqueta ensangrentadas , y una sonrisa que irradiaba maldad.-”Dios, que he hecho?, pensó.” Inmediatamente Egar se volvió hacia atrás, y vio la silueta de su madre. -¿Qué has hecho Edgar?-Nada.

….

La tarea de Edgar consistía en sacar un hecho histórico y plasmarlo en una cartulina, el navegando por internet encontró la fotografía de un pergamino que dice”cosas en latin” Eso decía encima de una imagen censurada. Eso le llamo la atención “ ¿Por qué la censuraron, pesnó”, pens´”. Le clickeo, y la ventana lo envió a una dirección dónde había un número de teléfono. Lo llamó y pronto le contestó un señor

–¿ Que desea?.

–Quiero, por favor, la abertura de la imagen..

Se hizo una pausa

-¿Para qué?

-Para hacer una tarea.

El señor río.

-Te lo voy a dar, pero no creas que es gratis.

-Está bien, ¿cuánto?. 

–Cien soles.

–Está bien, y colgó

Luego aparecieron unos mensajes en la mensajería de dgar.

-¿Estás seguro de hacerlo?.

-Estás seguro de que eso es lo que quieres.

Se dió con la sorpresa que en su perfil no había ningún número, es decir. Enviaba mensajes sin línea. 

–Debe ser uno de esos trucos para que ésto parezca más macabro–pensó.

….

La manó se levantó, e hizo emerger la cara blanca de Adolf Hilti. El se sorprendió, su madre gritó. Hitler  gruñó y terminó de salir del agujero que se dio en  el suelo, cúal pozo en medi del campo. 

–Hola, dijo alfin.

-Hola, dijo Edgar.